La tecnología que crea computadoras virtuales sobre computadoras reales se denomina tecnología de máquina virtual.
Al utilizar la tecnología de máquina virtual, por ejemplo, se pueden ejecutar varias computadoras virtualmente en una única computadora física.
Alternativamente, se pueden simular computadoras con una estructura diferente a la de una computadora física.
De manera similar a las máquinas virtuales, también es posible crear inteligencia virtual sobre la inteligencia real. Esto es lo que llamamos inteligencia virtual.
Por ejemplo, al imaginar una conversación entre varias personas o al actuar como un personaje diferente, los seres humanos están demostrando habilidades de inteligencia virtual.
La inteligencia artificial conversacional también posee habilidades de inteligencia virtual. Al generar diálogos entre dos personas o instruir a un personaje para que responda, resulta evidente que la inteligencia artificial actual exhibe altas habilidades de inteligencia virtual.
Orquestación de la Inteligencia
En los sistemas informáticos, la orquestación de sistemas se puede lograr utilizando máquinas virtuales.
La orquestación de sistemas permite la construcción y ejecución bajo demanda de sistemas cooperativos distribuidos, que se realizan combinando numerosas computadoras con diversas especificaciones y funciones.
Esto permite cambios flexibles en la configuración de los sistemas cooperativos distribuidos, lo que facilita las mejoras y la adición de funcionalidades.
Actualmente, al aplicar la IA conversacional, a veces se utilizan métodos para combinar múltiples IA con diferentes roles para realizar tareas organizadas.
En tales casos, la aplicación de la tecnología de orquestación de sistemas permite de manera similar el cambio flexible de múltiples roles y combinaciones de IA, facilitando las mejoras y la adición de funcionalidades.
Por otro lado, al aplicar la inteligencia virtual, es posible lograr la orquestación inteligente en lugar de la orquestación de sistemas.
Esto significa utilizar una única IA como entidad, pero dentro del procesamiento de esa IA, combinar múltiples inteligencias virtuales con diferentes roles para realizar tareas organizadas.
La combinación de múltiples IA a través de la orquestación de sistemas requiere el desarrollo de sistemas.
Sin embargo, con la orquestación inteligente, se puede completar con solo instrucciones de prompt, eliminando la necesidad de desarrollo de sistemas.
Al dar instrucciones en una interfaz de chat regular, se pueden lograr tareas organizadas a través de la orquestación inteligente.
Esto permite mejoras y adiciones de funcionalidades aún más flexibles y rápidas que con la orquestación de sistemas.
Deliberación Definitiva
La utilidad de la orquestación inteligente no se limita a eliminar el desarrollo de sistemas al permitir que la IA realice tareas organizadas.
Al instruir a la IA para que piense utilizando las habilidades de orquestación inteligente, se la incita a deliberar.
Esta deliberación no proviene de combinar una gran cantidad de información, sino de combinar una multitud de perspectivas.
Además, aprovechando las características de la orquestación inteligente, es posible instruirla para que refine o añada funciones repetidamente a los roles y estructuras de múltiples inteligencias virtuales, o incluso para que emprenda ciclos de eliminación y construcción (scrap-and-build).
Esto implicaría cambiar iterativamente el propio método de deliberación. Esta es la deliberación definitiva.
La deliberación definitiva puede mejorar la precisión del pensamiento al minimizar los malentendidos y errores, y ampliar el alcance del pensamiento a través de perspectivas multifacéticas. Además, la reacción química resultante de combinar numerosas piezas de información y perspectivas puede conducir a nuevos descubrimientos y a la expresión de la creatividad.
Conclusión
A través de la inteligencia virtual, un único modelo de IA puede participar en la deliberación cambiando entre roles y el conocimiento requerido para las tareas, lo que permite actividades intelectuales organizativas sofisticadas sin la necesidad de orquestación de sistemas.
La deliberación organizativa permite a la IA analizar y acumular experiencias de fracaso, lo que le permite actualizar su propio conocimiento. Dentro de los límites del recuento de tokens de entrada, que actúan como una restricción de memoria a corto plazo, también puede resumir el conocimiento y organizar la información obsoleta.
Como resultado, los casos en los negocios en los que la inteligencia artificial puede actuar genuinamente como sustituto humano aumentarán drásticamente.